Foto cortesía de: ~dkart71 |
Recuerdo que hace muchos años, siendo un niño,
me imaginaba como sería el mundo y la vida en el año dos mil: mi mente enseguida
se ponía en acción y se lanzaba a todo un torrente de imágenes futuristas,
carros voladores, máquinas tele-transportadoras, máquinas de salud (tipo Fuente
de la Eterna Juventud) en las cuales se entraba enfermo y/o viejo por un lado y se salía fuerte y
rozagante por el otro. Bueno, los hechos posteriores me han demostrado que nada
de eso es imposible, el desarrollo científico- tecnológico, electrónico e
informático nos ha demostrado la
realidad de que no hay casi nada imposible (hasta muchas veces jugamos con el
peligro de ser como Dios, no entro en la discusión de su existencia).
Por supuesto, enseguida se puede pensar que uno
exagera al ser tan optimista, al creer en que tanta tecnología (tampoco quiero
entrar en ese tipo de discusiones) puede llevar a resultados tan asombrosos que
pudieran llamarse milagros, o imposibles sin más ni más, pero no hay más que
ponerse en la mente de la gente de generaciones pasadas, y no hay que ir tan lejos en el tiempo, a
comienzos del siglo veinte podría ser suficiente, e imaginar que podrían haber
pensado de las comunicaciones tipo internet de hoy en día. De los viajes
espaciales, todavía era un ejercicio de imaginación demasiado grande, sólo
Ciencia-Ficción. No digamos los adelantos en Medicina, con esos equipos
modernos que “escanean” un cuerpo humano o parte de él para detectar cualquier
mal o daño, en Física ya llegamos hasta a la “Partícula de Dios”.
Si nos
vamos más atrás en el tiempo, hasta podía ser motivo de pena de muerte por
acusación de brujería y satanismo, el tener una imaginación tan
loablemente futurista. Como consecuencia, en cuantas épocas de la historia se
habrá tenido el triste resultado de que una persona veía el mundo igual, o muy
parecido, desde su nacimiento hasta su
muerte. Les aseguro que las generaciones humanas nacidas en el siglo veinte han sido las más
“afortunadas” en cuanto a ver cambios progresistas a lo largo de su
existencia (tampoco quiero discutir
acerca de lo negativo, como cambio climático, contaminación ambiental, etc).
Ahora, de todos los artefactos imaginados por
muchos y también por mí en mis años infantiles y también juveniles, sigue
existiendo uno que me mantiene a la expectativa, con cierto pesimismo en su
realización, a pesar de que nuestros amigos los Físicos han tenido algunos
logros trabajando con partículas. Ese aparato es “La Máquina del Tiempo”,
fuente de tanto material de Ciencia-Ficción (por tanto, hasta que no se
demuestre lo contrario, si alguien lo imaginó: es posible). El viajar al
pasado, y hasta al futuro sigue siendo un reto muy grande, el develar tantos
secretos y misterios, hasta mentiras históricas, revisar el origen de muchas
leyendas y tradiciones, quizás hasta el
origen del Universo y de la Vida, me resulta algo demasiado interesante. Por
ahora, hay que conformarse con esa imposibilidad y con seguir teniendo a la
mano lo escrito por historiadores, por costumbristas y hasta por poetas, para
hacerse una idea de la vida en el pasado y por escritores de Ciencia-Ficción
para fisgonear un poco en el mundo del futuro.
Mi nombre es Daniel Delgado Pereira, de
Venezuela, siempre he tenido la inquietud por la Historia, pero de un modo
crítico, siempre cuestionando lo que se narra, que no se convierta la Historia
en una simple relación de hechos y
personajes. También me encantan la
Mitología y las leyendas históricas y tratar de hilvanar un poco de “Historia”
con ellas. Invito a quienes tengan este
tipo de inquietud a participar, hacer sus aportes, y hasta a discutir constructivamente en los
temas que resulten polémicos. De más
está decir, que aunque mi nacionalidad es venezolana, son bienvenidos los temas
de todos los países, el compartir sobre estas cosas nos resultará muy
interesante y de aprendizaje general.
Sean bienvenidos a nuestra Máquina del Tiempo
Virtual, espero que resulte provechosa y hasta de distracción para la
tripulación, todos los temas históricos, mitológicos y otros tipos de leyendas
y tradiciones, serán recibidos con mucho agrado, sólo me gustaría que no se
insultara ni denigrara de nadie, vamos a ser objetivos y a disfrutar esta
actividad.
Excelente, me encant! Saludos
ResponderEliminarmuy entretenido señor daniel lo felicito
ResponderEliminarGracias por sus comentarios, espero que sigan en contacto. !Muchos saludos!
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