Procesión del Señor Alcalde en el Támesis, por el Canaletto, 1747 (Detalle). Fuente: Centro de Arte Británico de Yale. New Haven, Conn, EEUU. |
El lapso entre la promulgación y la entrada en vigencia de la Ley de Timbres, solo sirvió para incubar el descontento en las colonias. Para mayo de 1765, era el tema del día, no había reunión en la que no se hablara de ello. Por entonces, en la Cámara de Burgesses de Virginia se debatía acerca del derecho a participar en la toma de decisiones, a ser escuchados en el Parlamento Inglés, a la hora de la elaboración de las leyes que afectaran los ciudadanos americanos. Viéndolo bien, no era mucho lo que pedían.